Este lunes 11 de diciembre de 2023, el sindicato de transportistas del estado Lara convocó una rueda de prensa para solicitar un aumento en la tarifa del pasaje urbano a 0,40 centavos de dólar o, alternativamente, a 15 bolívares.
Esta demanda surge en respuesta a la crisis económica que afecta al sector y los transportistas argumentaron que la tarifa actual, de 10 bolívares, no cubre los costos operativos de las unidades de transporte.
Giovanni Peroza, secretario general del Sindicato Automotor del estado Lara, advirtió que si no se aprueba un aumento de al menos 15 bolívares, el sistema de transporte podría desaparecer.
“Hoy hemos convocado al Consejo Consultivo del Transporte Urbano para abordar preocupaciones fundamentales que amenazan nuestra capacidad para continuar brindando este servicio vital a la ciudad. La primera es el ajuste de la tarifa, un requisito establecido en la ley de transporte que dicta que las tarifas deben ajustarse progresivamente al principio o al final del año. Este es un tema que nos preocupa y que queremos discutir en detalle”, puntualizó Peroza.
Escasez de combustible amenaza al transporte en Lara
Además de la tarifa, otro problema que afecta al sector es la escasez de combustible. Peroza denunció que tienen dificultades para obtener gasoil, gasolina y gas, y que las estaciones de servicio asignadas para el transporte son insuficientes, además de que la cantidad de combustible que llega es muy poca.
“Hicimos el planteamiento específicamente para el gas, gasolina y el gasoil porque comprarlo en precios internacionales con nuestros ingresos, no podemos”, resaltó Peroza.
El sindicato propone que la tarifa se ancle a la divisa estadounidense a 0,40 centavos de dólar, lo que equivaldría a 14,24 bolívares, según la tasa oficial del Banco Central de Venezuela.
El secretario general del sindicato también destacó que “durante la pandemia, el sector llegó a tener menos del 10% de la flota operativa en la entidad”. Esta cifra podría ser similar en la actualidad debido a los bajos ingresos y altos costos operativos.
“En los últimos días, debido a las actuales tarifas, el costo de los repuestos y la escasez de combustible, nos hemos visto obligados a reducir nuestro servicio, lo que ha resultado en menos unidades en circulación en horas pico. A menudo nos preguntan si hemos declarado una huelga. La respuesta es no. Lo que estamos experimentando es un paro técnico, una situación que se produce cuando no hay combustible, no hay suministros y las unidades deben ser retiradas debido a la falta de repuestos”, concluyó Peroza.
La comunidad tiene opiniones divididas sobre el aumento propuesto, lo que añade una capa adicional de complejidad a la situación.
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