Los videos son los productos estrellas de la desinformación. Su formato, su facilidad de reproducción y de difusión, hacen que sean de los preferidos por los operarios.

La periodista, profesora universitaria y representante del Observatorio Venezolano de Fake News (OVF), Isabel Viloria, explicó en el programa Háblame Bajito que transmite Radio Fe y Alegría Noticias algunos elementos comunicacionales que sirven a las maquinarias que promueven la desinformación.

Por ejemplo, en el mundo se posicionaron los videos cortos, las llamadas cápsulas, que ofrecen una gran cantidad de información en poco tiempo.

“La manera más fácil de construir un contenido llamativos es, justamente, a través de los videos. Por eso logran viralizarse y captar la atención”, explicó la profesora.

¿Cómo opera la desinformación?

La desinformación utiliza elementos comunicacionales atractivos que enganchan a los usuarios.

Viloria precisó que en el caso de las noticias, los usuarios deben ser capaces de reconocer algunos atributos para descartar falsedad en los contenidos.

Primero, es ubicar las fuentes, el de dónde viene la información. En el caso de los videos con contenido falso, “muchas veces nos habla una sola voz con tono de alerta”.

“Cuando un periodista o un profesional de la comunicación construye un contenido de calidad, no llama a la acción, no convoca a que se viralice”. Más bien, aporta contenido de calidad y datos concretos que pueden ser verificables, apuntó.

Apelar a la emocionalidad

“Cuando un contenido está hecho para que tú te emociones, bien sea de forma negativa o positiva, ya por ahí es un indicio claro de que estamos frente a un contenido manipulado, falso, descontextualizado”, explicó Viloria.

Si se está frente a un video que te indigna mucho o que te causa mucha alegría, hay que dudar de su veracidad y buscar otras fuentes para confirmar los datos.

Frases para dudar

La desinformación busca que la persona haga algo después de recibir un contenido, bien sea en video, audio, texto u otro formato.

Existen frases o palabras que tienen estos contenidos para incitar a las personas. La profesora Viloria nombró algunas:

  • ¡Reenvíalo ya!
  • No te quedes con este contenido en las manos
  • ¡Cuidado!
  • ¡Último minuto!
  • ¡Alerta!
  • Esto acaba de salir

“Son como avisos de estar en presencia de contenidos que no necesariamente han pasado por un proceso riguroso de verificación”, que es lo que ofrece el periodismo.

¿Cuándo opera la desinformación?

Desde el año 2019, el Observatorio Venezolano de Fake News trabaja en detectar noticias falsas y emisores de noticias falsas.

La desinformación opera y se incrementa en coyunturas sociales importantes. Por ejemplo, durante la pandemia provocada por la COVID-19, se detectaron mensajes con cifras falsas, teorías conspirativas, falsos remedios, teorías antivacunas y otras que generan mayor preocupación a las personas.

De igual forma, la representante del Observatorio explicó que temporadas electorales también sube la cantidad de mensajes falsos o manipulados.

“En contexto electoral se multiplican las informaciones que tienen que ver con los candidatos, con las campañas, con las encuestas”, dijo.

Por otro lado, la especialista en verificación precisó que las plataformas de mensajería instantánea son una autopista de desinformación “en la que cada vez son más frecuentes los contenidos que se vitalizan”.

Los videos son más llamativos por que a la gente le gusta que le echen un cuento.

Videos reciclados y descontextualizados

Con el pasar del tiempo, los productos comunicacionales se reciclan y se siguen difundiendo en coyunturas específicas.

Desde el Observatorio Venezolano de Fake News también identificaron videos que se editan para que parezcan actuales y, aunque las imágenes y los hechos son reales, no se corresponden con la actualidad.

Las audiencias deben estar atentas a todos los elementos de comprobación para no caer y multiplicar la desinformación.

Escuche la entrevista que ofreció Isabel Viloria a la periodista Carlota Rojas:

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