El administrador apostólico de la Arquidiócesis de Cumaná, monseñor Mariano Parra, encabezó este 20 de abril, Domingo de Resurreción, la bendición del mar y del agua en las orillas del Golfo de Cariaco, en el estado Sucre.
En una ceremonia que estuvo llena simbolismo espiritual y devoción cristiana, el sacerdote expresó que “hoy celebramos a la orilla del Golfo de Cariaco, la bendición del mar, en primer lugar; y luego la bendición del agua, para que las personas la tengan en sus casas”, dijo.
Asimismo, Parra les recordó que esa agua representa el bautismo que recibieron un día y que a la vez santifica, reseñó Parra durante la liturgia, hecha en el marco de la festividad de la Resurrección del Señor.
“Le pedimos a Dios que bendiga en abundancia este hermoso mar que nos regaló, este Golfo de Cariaco, y que sea para nosotros fuente de alabanza a Dios, Padre Creador”, concluyó.
Como cada año, cientos de fieles de diferentes sectores de la capital sucrense acudieron a esta zona de la parroquia Valentín Valiente para pedir por bendiciones, especialmente los pescadores, quienes claman para que sus faenas sean prósperas y capturen peces en abundancia durante todo el año.
El acto reunió a feligreses, autoridades locales y pescadores en el sector Caigüire de Cumaná, quienes participaron con entusiasmo en la jornada pascual.
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